¿Sabías que la actividad nocturna felina es la perdición de muchos dueños de gatos? Imagínate que justo cuando estás entrando en la fase de sueño REM, un minino de 4 kilos salta sobre tu pecho, juega con tus pies o maúlla insistentemente pidiéndote comida. ¿Te pasa a ti? La mayoría de las personas que sufren este problema, intentan combatir este comportamiento alimentando al gato o prestándole atención para tratar de calmarlo. Aunque esto no es lo correcto, cuando alguien está desesperado por dormir hace lo que sea necesario para recuperar la paz.
En este artículo te vamos a explicar por qué tu gato no te deja dormir por la noche, y te daremos unas pautas para ayudarle a relajarse.
¡Vamos a ello!
Los gatos como animales nocturnos
Los gatos son conocidos por su comportamiento nocturno, lo cual puede llegar a ser un problema para algunos dueños, ya que su gato no les deja dormir. Esta conducta se debe principalmente a:
- Herencia salvaje: Los ancestros de los gatos domésticos eran predominantemente criaturas crepusculares o nocturnas. Esta adaptación les permitía cazar en momentos del día en los que sus presas estaban más activas y menos alerta.
- Adaptación sensorial: Los gatos están equipados con habilidades sensoriales que les favorecen durante la noche. Sus ojos, por ejemplo, pueden aprovechar la mínima cantidad de luz para ver en condiciones de baja iluminación. Además, sus bigotes y su oído agudo les ayudan a detectar y navegar en su entorno, lo que es ideal para la noche.
- Estrategia de supervivencia: Desde una perspectiva evolutiva, ser activo durante la noche también ayudaba a los gatos a evitar a los depredadores más grandes, que generalmente cazaban durante el día.
- Comportamiento instintivo: La actividad nocturna también está ligada al comportamiento territorial y de marcado que realizan los gatos. Durante la noche, pueden explorar y marcar su territorio con más tranquilidad, sin la interferencia de humanos u otros animales.
Además de lo anterior, puede que tu gato no te deje dormir debido a la falta de actividad diurna o al aburrimiento. Ten en cuenta que los gatos suelen pasar el día durmiendo y necesitan ciertos estímulos para mantenerse activos durante unas horas.
Consejos para que tu gato duerma por la noche
Lo primero que debes saber es que encerrar a tu gato fuera del dormitorio por la noche no es una solución. Si haces esto se pondrá a maullar para que lo liberes. Así que descarta esta posibilidad.
La mejor solución para que tu gato te deje dormir es aumentar su nivel de actividad durante el día de modo que por la noche esté cansado y con ganas de dormir. El problema está en que si pasas gran parte del día fuera, no lo puedes controlar, pero sí puedes crear un ambiente que le estimule y aumente su vigilia diurna. A continuación, te damos algunos trucos que puedes poner en marcha para conseguirlo.
Establece una rutina diaria
Los gatos son criaturas de hábitos y responden positivamente a las rutinas establecidas. Para fomentar un buen hábito de sueño, es importante que establezcas y mantengas una rutina diaria consistente.
Dedica tiempo a jugar con tu gato unas horas antes de tu hora de dormir. Utiliza juguetes interactivos para gatos que contribuyan a gastar su energía excesiva y satisfacer su instinto de caza. Esto ayudará a que tu gato se canse y esté más preparado para dormir cuando tú lo hagas.
Crea un entorno de sueño
Revisa el entorno en el que tu gato duerme. Asegúrate de que tenga un espacio cómodo, tranquilo y acogedor, que sea solo suyo. Muchos felinos disfrutan de las camas para gatos en lugares elevados, donde se sienten seguros y pueden observar su entorno.
Además, mantén la habitación a una temperatura agradable, ya que los cambios de temperatura pueden afectar la calidad del sueño de tu gato.
Controla su alimentación nocturna
Si tu gato no te deja dormir por la noche, puedes probar a gestionar sus horarios de alimentación. Alimenta a tu gato con una comida pequeña pero sustanciosa antes de tu propia hora de dormir. Los gatos, al igual que los humanos, tienden a sentir sueño después de comer. Esto puede sincronizar sus horarios de sueño con los tuyos.
Pon atención a su salud en general
Asegúrate de que tu gato esté sano. Un gato que no duerme bien por la noche puede estar experimentando problemas de salud subyacentes. Un chequeo regular con el veterinario puede descartar o tratar cualquier condición que esté afectando su sueño.
Además, la salud dental, el cuidado preventivo de parásitos y una nutrición adecuada juegan un papel crucial en la calidad de vida y el comportamiento nocturno de tu gato.
Fomenta la calma antes de dormir
Para que tu gato duerma por la noche, es beneficioso crear un ambiente calmado antes de la hora de dormir. Puedes usar feromonas antiestrés para gatos, los cuales ayudan a crear una atmósfera de tranquilidad y seguridad.
También, considera suaves melodías que puedan ser especialmente compuestas para la relajación de los felinos.
En el siguiente vídeo Laura nos habla sobre los beneficios de la música para los gatos. ¡No olvides suscribirte a nuestro canal de Youtube Kiwoko TV!
Adopta un compañero
Si tienes un solo gato, considera la posibilidad de adoptar un compañero. Disminuirá su aburrimiento y aumentará su nivel de actividad durante el día. Además dirigirá su necesidad nocturna de jugar hacia su nuevo amigo.
| En nuestro post "¿Cómo presentar a dos gatos que van a vivir juntos?" te damos información importante en el caso de que decidas adoptar. |
Aumenta sus horas de juego
Juega con tu gato por la noche antes de acostarte. Prueba con un juguete con puntero láser y con juguetes tipo caña de pescar que incitan mucho a correr y saltar.
Te recomendamos que eches un vistazo a nuestro artículo "Descubre cuáles son los 5 juegos favoritos de los gatos" para pasar momentos de calidad junto a tu mejor amigo.
En definitiva, los patrones de actividad nocturna de los gatos están profundamente arraigados en su evolución. Aunque puede ser molesto sobre todo cuando tu gato no te deja dormir, comprendiendo sus necesidades y aplicando estos consejos conseguirás que tu gato duerma por la noche, asegurando la felicidad y el bienestar de ambos.
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