A nadie se le pasa por alto que un gatito tiene unas necesidades nutricionales diferentes a las de un gato adulto. En cambio, es frecuente que no pensemos lo mismo con los gatos mayores, pero ellos también necesitan una comida especial, adaptada a su edad.
¿A qué edad se considera que un gato es mayor?
El gato adulto va experimentando cambios en su organismo a medida que pasa el tiempo. Estos cambios empiezan antes de que el gato pueda considerarse anciano o sénior, ya que a los 7 años de edad ya hay que adaptar la alimentación del gato adulto respecto a la que tomaba hasta ese momento.
Por ejemplo, si nuestro gato toma un alimento para gatos esterilizados, a partir de los 7 años debe seguir tomando un alimento para gatos esterilizados pero formulado para los que ya han cumplido 7 años.
Asimismo, debido a que los cambios en el organismo del gato siguen produciéndose según pasa el tiempo, la necesidad de cambiarle el alimento se vuelve a producir cuando cumple 12 años, de modo que debería recibir un alimento especial para gatos esterilizados con 12 años o más.
¿Qué cambia en el organismo del gato cuando envejece?
Con el paso del tiempo, los cambios que se producen en el gato son de dos tipos, internos y externos.
Los cambios internos más importantes son que su sistema inmunitario es menos eficaz, que digiere peor los alimentos y que sus funciones corporales se ralentizan. También se producen cambios en los sentidos del gato, especialmente pérdida de olfato y gusto, lo que puede afectar a su apetito.
Otros cambios internos tienen que ver con el peor funcionamiento de los riñones, pero también existe mucho riesgo de que aparezcan trastornos como osteoartritis, hipertiroidismo y diabetes. Afortunadamente, algunas de estas enfermedades se pueden tratar con una dieta especial.
En cuanto a los cambios externos, se produce una reducción de la actividad, un aumento del sueño y que se muestren menos sociables. Otros cambios externos están relacionados los problemas dentales, como la gingivitis o la pérdida de dientes, que pueden producir dolor y falta de apetito, lo que produce pérdida de peso.
También pueden aparecer problemas articulares, que además de afectar al movimiento, pueden incluso reducir su capacidad de acicalarse.
Qué nutrientes hay que reforzar cuando un gato se hace mayor
Debido a los cambios propios de la edad, el organismo se ve más expuesto a la aparición de trastornos asociados al envejecimiento, por ejemplo, los relacionados con la movilidad. Por ello, su comida debe estar reforzada con glucosamina, sulfato de condroitina, ácidos grasos EPA/DHA o extracto de mejillón verde.
Otros trastornos son los digestivos, por lo que los alimentos para gatos mayores están elaborados con proteínas de alta digestibilidad. Asimismo, la pulpa de remolacha puede tener un efecto beneficioso, así como los ácidos grasos omega 3.
Las enfermedades urinarias también son frecuentes en los gatos de edad avanzada, por lo que es necesario restringir la cantidad de fósforo de su dieta, especialmente porque cuando un gato padece insuficiencia renal, el fósforo es uno de los elementos que primero alcanza niveles tóxicos en la sangre.
Por supuesto, la ingesta de agua es imprescindible y debe mantenerse lo más alta posible, para lo que puede contribuir una dieta húmeda, cuyo contenido en agua aumenta el volumen de la orina, reduce su concentración y, con ello, el riesgo de que se formen cálculos urinarios.
Por qué un gato mayor necesita una dieta especial
Como hemos visto, el gato mayor necesita una comida especial porque sus funciones vitales pierden capacidades que se pueden compensar con el alimento. Este es el caso de su sistema digestivo, al que le cuesta más digerir los alimentos y absorber los nutrientes que contienen, muy en especial las proteínas y las grasas.
Es muy frecuente que los gatos de edad avanzada también suelan tener problemas dentales que dificulten la acción de comer, así que los alimentos húmedos son una alternativa. Además, como ya hemos visto, el olfato y el gusto del gato mayor disminuyen, lo que afecta al interés que muestra por la comida. Para reducir este efecto, una de las características que tienen los alimentos especiales para gatos mayores es que mejoran considerablemente su palatabilidad para que el gato se sienta más atraído por ellos y no coma menos cantidad de la que necesita.
Recuerda, si tu gato ya ha cumplido 7 años y mucho más a partir de los 12 años, es necesario que su alimentación cumpla cuatro normas: que se digiera fácilmente, que sea completa y equilibrada, que ayude a ralentizar los procesos propios del envejecimiento y que ayude a mantener el bienestar del gato.