¿Sabías que los gatos también pueden padecer artrosis?
La artrosis en gatos, también conocida como osteoartritis, es una enfermedad degenerativa que afecta a sus articulaciones, agravándose a medida que aumenta su edad. Es importante prestarle atención y poner un tratamiento lo antes posible para evitar que las articulaciones de tu felino sufran más de la cuenta.
A continuación, te explicamos todo lo que debes saber sobre la artrosis en gatos. Y en el caso de que tu mejor amigo padezca esta enfermedad, te damos una serie de consejos para que pueda tener una buena calidad de vida y ser feliz.
¡Sigue leyendo!
¿Qué es la artrosis en gatos?
La artrosis en gatos, es una enfermedad degenerativa que afecta a las articulaciones, causando dolor, inflamación y pérdida de movilidad.
Esta condición se produce cuando el cartílago que protege las articulaciones se desgasta, lo que provoca que los huesos rocen entre sí. Es más común en gatos mayores, pero puede afectar a cualquier gato debido a factores como el sobrepeso, lesiones previas o la predisposición genética. La detección temprana y el tratamiento adecuado son esenciales para mejorar la calidad de vida de los gatos afectados.
Causas y síntomas
Existen múltiples factores que pueden conllevar a la artrosis en gatos. Aun así, las causas más comunes son:
- Edad: Como hemos mencionado anteriormente, la artrosis es más común en los gatos mayores debido principalmente al desgaste natural de las articulaciones.
- El peso: El sobrepeso pone mayor presión sobre las articulaciones de los gatos, lo que acelera la degeneración de los cartílagos.
- Genética: Algunas razas de gatos, como el Maine Coon, el Persa o el Siamés, que tienen una predisposición genética a desarrollar artrosis debido a las características heredadas de la propia raza.
- Lesiones: Los traumas o las lesiones previas en las articulaciones pueden predisponer a los gatos a desarrollar artrosis en un futuro.
- Otras enfermedades: Los problemas de desarrollo óseo, como por ejemplo la displasia de cadera, pueden aumentar el riesgo de artrosis en los gatos.
Con lo que se refiere a los síntomas, es cierto que en ocasiones puede ser complicado detectar de forma sencilla la artrosis en gatos, no obstante, hay signos comunes que pueden desvelar que tu gato tiene esta afección:
- Cojera: La cojera es uno de los síntomas más evidentes de la artrosis en gatos. Puedes empezar a notar que tu gato cojea al caminar, sobre todo al levantarse después de periodos largos de descanso.
- Rigidez o pérdida de movilidad: Los gatos con artrosis pueden mostrar rigidez en sus articulaciones, lo que les limita su capacidad para moverse con agilidad. Si notas que cada vez le cuesta más subir las escaleras o al sofá, o te encuentras que ha hecho sus necesidades fuera del arenero, puede ser un signo muy claro de que está perdiendo movilidad, y por lo tanto puede padecer artrosis.
- Cambios en su actividad diaria: Debido al dolor que la artrosis les causa en sus articulaciones, los gatos se vuelven menos activos y tienen menos ganas de jugar. Además, puedes notar que tu gato no interactúa contigo de la misma forma, e incluso a veces puede estar más irritable.
- Dificultad para su higiene diaria: Como bien es sabido, los gatos son conocidos por ser animales muy limpios. Si el pelo de tu mascota está enredado o incluso más sucio de lo habitual, puede deberse a que le cuesta más acicalarse debido a sus dolores. También puedes notar que tiene las uñas más largas, ya que disminuye su actividad y el uso de su rascador.
- Pérdida de apetito: La artrosis en gatos puede hacer que en ciertas ocasiones pierdan el interés por comer, lo que puede conllevar a una pérdida de peso. Este síntoma es muy importante de detectar, ya que necesita tener un peso saludable para reducir la presión de sus articulaciones.
Tratamiento para los gatos con artrosis
Si has notado alguno de los anteriores síntomas descritos en tu gato, debes acudir al veterinario para que le haga las pruebas pertinentes, y que así pueda verificar si tu gato padece de artrosis para establecer el tratamiento adecuado. Es importante que sepas que la artrosis en gatos no tiene cura, pero aun así, un diagnóstico precoz es esencial para tratarla y ayudar a tu gato que esté lo más cómodo posible a lo largo de su vida.
Si se confirma la enfermedad, tu veterinario te recomendará:
- Medicamentos como anti-inflamatorios y analgésicos para reducir su dolor. Estos siempre tienen que estar recetados por el veterinario.
- Ciertas terapias físicas como la fisioterapia o los masajes en sus articulaciones.
- Un cambio de dieta para que su comida felina apoye su salud articular y evite el sobrepeso.
- Condroprotectores destinados a proteger las articulaciones para frenar el desgaste articular.
¿Por qué elegir Condrovet Force HA para tratar la artrosis felina?
Como hemos mencionado, los condroprotectores a base de glucosamina, condrotín sulfato y colágeno, que nutren sus articulaciones, como Condrovet Force HA Gatos, ayudan a mejorar la salud articular de tu gato. Pero, ¿Por qué?
- Condrovet Force Ha está formulado con condroitín sulfato, glucosamina, ácido hialurónico y colágeno, que ayuda a mantener la flexibilidad y la elasticidad de las articulaciones, y además, desacelera el desgaste del cartílago.
- Es especialmente beneficioso para gatos mayores y para aquellos con sobrepeso, ya que este condroprotector promueve una mejor salud articular y calidad de vida.
- Su administración es muy sencilla, ya que las cápsulas pueden abrirse y mezclarse con su alimento.
Por otro lado, también existe Calmurofel, unas cápsulas que respaldan la salud articular y la flexibilidad de los gatos, retrasando la aparición de ciertas enfermedades como la artrosis felina.
Consejos para cuidar a un gato con artrosis
Aunque la artrosis es una enfermedad permanente, es esencial seguir el tratamiento recetado por el veterinario, y realizar chequeos periódicos para que tu amigo tenga una buena calidad de vida.
Además, puedes ayudar a tu gato a manejar la artrosis con estos consejos:
Ejercicio moderado
Debes fomentar que tu gato haga ejercicio regular, pero siempre asegurándote de que sea de bajo impacto. Para ello, puedes jugar con él suavemente, o proporcionarle juguetes interactivos felinos, para ayudarle a que se mantenga activo tanto física como mentalmente, pero sin forzar en exceso sus articulaciones.
Crea un ambiente cómodo para él
Es muy probable que tu gato pueda tener ciertas limitaciones en su movimiento, por lo que debes proporcionarle un entorno seguro, cómodo y accesible. Para ello, puedes colocar varias camas para gatos y almohadillas suaves por la casa, para que pueda descansar sin tener que realizar esfuerzos y así evitar que tenga que saltar desde las alturas.
Si quieres evitar que tu gato salte a los muebles, puedes poner rampas o escalones, para facilitar su movimiento por toda la casa.
También es muy importante que su comedero y bebedero estén siempre en lugares de fácil acceso para él, y así evitar la pérdida de peso o la deshidratación en gatos.
Ayúdale a mantener su higiene
Asegúrate de que tu felino puede acceder sin problema a su arenero para gatos o bandeja sanitaria, y si es necesario, proporciónale uno que tenga los lados más bajos para que le sea más fácil entrar o salir.
Por otro lado, si a tu gato le cuesta acicalarse, puedes cepillarlo para mantener su pelo en perfecto estado.
En conclusión, la artrosis en gatos requiere de atención y cuidados continuos. Reconocer los síntomas y actuar a tiempo puede marcar una gran diferencia en la calidad de vida de tu felino. Recuerda que sus cuidados deben ser integrales, e incluir condroprotectores como Condrovet Force HA de Bioibérica. Las terapias físicas y realizar ciertos ajustes en su estilo de vida, puede ser muy beneficioso para que tu amigo peludo tenga una vida larga y feliz.
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