La adopción es uno de los actos más puros de amor hacia los animales. Esta, además de brindar un nuevo hogar, permite crear lazos que durarán para toda la vida. En este artículo, os contaremos la singular historia entre Tyrion y María, una experiencia única llena de esperanza y oportunidades.
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El inicio de la nueva oportunidad
En noviembre del 2021, llegó Tyrion, un pequeño perrito con una mirada muy profunda, junto con sus tres hermanitas a nuestra tienda Kiwoko Badajoz. Al igual que otros cachorros abandonados o en estado vulnerable, ellos también compartieron la historia de haber sido parte de una camada no deseada.
Sin embargo, el destino de Tyrion cambiaría al conocer a María, una colaboradora auxiliar de Kivet La Serena, quien no se resistió al encanto de este cachorro al verlo tan pequeño, correteando, jugando y reclamando su atención. Para ella, Tyrion era un cachorro muy especial.
Una gran decisión que tomar
Con el tiempo, varias familias preguntaron por Tyrion, pero María, encargada de elegir el hogar adoptivo ideal, sintió que no eran las familias adecuadas para las necesidades de este perrito. Ella sabía que este peludito merecía ser parte de un nuevo hogar lleno de amor, cariño y paciencia.
Así, ante la conexión especial que ella sentía por este cachorro, María tomó la decisión de ofrecerle su hogar a Tyrion, una oportunidad que les cambiaría la vida a ambos.
En palabras de María: “Cuando se quedó solito en el canil de adopción, decidí que tenía que venirse a casa al menos el fin de semana para que no estuviese solito. Según llegó a casa se puso a corretearla entera, le vi tan feliz y dándonos tanto amor a todos que supe que había llegado para quedarse.”
Un nuevo hogar, una nueva familia
Tyrion al llegar a casa de María, se encontró con "Kennen", un perro con doce años, que al principio le gruñía por la diferencia de edad. Sin embargo, poco a poco, se fueron acostumbrando el uno con el otro, forjando una fuerte amistad. Posteriormente, la familia creció y se complementó con "Comino" un gatito adoptado de un año y medio.
María nos cuenta lo siguiente: “¡Sí! “Kennen”, un mestizo de 12 años y también adoptado procedente de una muy mala familia. Y “Comino”, un gato de 6 años que un buen día apareció en la calle cerca de la clínica donde trabajo y nunca más se separó de mí. La verdad que los tres están superunidos, especialmente Kennen y Tyrion. Hace poquito, Kennen estuvo malito con un tumor y Tyrion ha estado muy pendiente de él, sin separarse ni un momento.”
Tyrion encontró su lugar gracias a la bondad de María. Ahora, solo recibe amor y cuidados cada día, juega con su hermano perruno y gatuno, y disfruta de la vida dentro de un hogar cálido.
La adopción animal es una oportunidad para cambiar la vida de un perro en situación de abandono y para enriquecer la nuestra. Si estás pensando en adoptar una mascota, abre tu corazón a las posibilidades y dale la oportunidad a un peludito de encontrar la felicidad.
En Kiwoko unimos fuerzas con asociaciones y protectoras para fomentar la adopción y acabar con el abandono. Si quieres beneficiarte de la mejor compañía y hacer crecer la familia, pásate por nuestra web Kiwoko Adopta ¡Y no te pierdas antes nuestro post "Todo lo que debes de saber antes de adoptar!