Una de las claves para asegurarte de que tendrás un perro feliz, seguro de sí mismo y bien adaptado de por vida, es enseñarle a socializarse. Es de vital importancia que desde cachorro aprenda a relacionarse con otros perros.
A continuación, puedes aprender cuál es el mejor momento para socializar a tu cachorro, cómo hacerlo bien y por qué es importante.
Cuándo socializar a tu cachorro
Desde las siete semanas hasta los cuatro meses de edad, tu cachorro atraviesa un período que formará de manera permanentemente su personalidad futura.
Las experiencias que viva durante esa etapa te darán las claves de cómo reaccionará ante diferentes situaciones cuando sea adulto. Por lo que deberás mostrar mucha atención durante sus cuatro primeros meses para que su carácter se forme sin miedos ni fobias, ni malos comportamientos.
¿Por qué es necesario socializar a tu cachorro?
El objetivo principal de la socialización es ayudar a tu cachorro a que se acostumbre a todo tipo de formas, sonidos y olores de una manera positiva.
Una socialización adecuada puede evitar los miedos más comunes y le ayudará a convertirse en un compañero equilibrado, educado y feliz. En nuestro blog encontrarás información al respecto sobre los siguientes miedos y consejos sobre adiestramiento:
- Miedo a los petardos
- Miedo a las bicicletas
- Miedo a otros perros
- Miedo a las escaleras
- Miedo a las personas
- Miedo a los extraños
- Miedos a la oscuridad
- Miedo al veterinario
- Miedo a ir en coche
Si el problema persiste e impide vivir una vida plena al perro, no dudes en acudir a un etólogo para recibir ayuda profesional, tras unas sesiones todo suele ir mejor.
Cómo socializar a tu cachorro paso a paso
Desde el momento en el que el cachorro llega a casa contigo comienza el período crucial de socialización. Aquí te damos los pasos básicos a seguir para socializar a tu cachorro:
- Preséntale nuevas formas, sonidos y olores
- Haz que sea positivo
- Involucra a la familia
- Da pequeños pasos
- Sácalo a la calle
A continuación, entra en detalle de cada paso para que tu cachorro crezca seguro de sí mismo y sea amigable con el mundo que lo rodea.
1 Preséntale nuevas formas, sonidos y olores
Para un cachorro, el mundo entero es nuevo, extraño e inusual.Trata de que interactúe con tantos tipos de personas, lugares, ruidos y texturas diferentes como puedas. Eso significa, por ejemplo, que camine sobre alfombras, maderas, baldosas, suba y baje escaleras, etc.
2 Haz que sea positivo
Lo más importante es que tu cachorro asocie lo nuevo a algo agradable por ejemplo con golosinas y elogios. No te estreses, los perros pueden leer tus emociones, así que si estás nervioso al presentarle a tu cachorro a un perro más grande, por ejemplo, tu cachorro también estará nervioso, y esto puede provocar que tenga miedo de los perros más grandes en el futuro.
3 Involucra a la familia
Deja al perro con personas allegadas y que lo quiera. La familia puede ayudar a que el perro entienda que existen más personas que lo protegen y lo cuidan. Esto también reafirmará que la mascota no vea a las personas como un peligro ni al dueño como único humano de confianza.
4 Da pequeños pasos
Trata de evitar hacer las cosas demasiado rápido. Comenzar este proceso llevando a tu cachorro a una fiesta o a un lugar público muy concurrido puede ser abrumador y acabar en una respuesta temerosa a grupos de extraños en el futuro, por eso ve forma progresiva.
5 Sácalo a la calle
Una vez que tu cachorro esté acostumbrado a distintos estímulos, muévete fuera de su zona de confianza. Llévalo a la casa de un amigo, a diferentes calles del barrio, y así poco a poco verá nuevos entornos y lugares sin sentirse inseguro.
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