¿Por qué mi gato no maulla?

El maullido es una de las tantas formas de comunicación que tienen los gatos y que más curiosidad nos da a los humanos. Para llamar la atención, pedir comida o caricias, los gatos tienen distintos tipos de maullidos, y saber por qué estos animales lo hacen es el tema principal de esta publicación. 

Está demostrado que los gatos sólo maullan para comunicarse con los humanos y que utilizan otros métodos de comunicación con el resto de felinos, como los gruñidos o el ronroneo. En la naturaleza, los gatitos son capaces de maullar para avisar a su madre de que están heridos, tienen hambre o frío pero, con el tiempo, dejan de hacerlo y no vuelven a maullar. 

Al ser unos animales solitarios, los felinos no necesitaban comunicarse con otros animales, ni siquiera con otros ejemplares de su especie y, cuando lo hacían, utilizaban el olfato, dejaban rastros de orina o se frotaban entre ellos. Al comenzar a relacionarse con los seres humanos, empezaron a desarrollar los maullidos, ya que el sentido del olfato de las personas no está tan desarrollado y los orines de los gatos son más un problema que un mensaje. 

Por ello, la relación entre gatos y humanos hizo que los primeros desarrollasen una forma de comunicación para tratar con las personas y llamar su atención. Además, este maullido está en constante evolución, y muchos gatos son capaces de emitir un sonido que recuerda mucho a palabras reales (aunque es probable que no sepan lo que significa y lo hagan sin darse cuenta).

No todos los gatos maullan de la misma manera, y algunos son más parlanchines que otros, de ahí que el que un gato deje de maullar sea un tema más preocupante de lo que parece, pudiendo llegar a significar un problema de salud más o menos grave. 

A continuación, te vamos a mostrar algunas de las razones por las que tu gato ha dejado de maullar, pero recuerda, cualquier anomalía que encuentres en tu gato házsela saber a un especialista o veterinario, pues serán ellos quienes mejor te sepan dar una respuesta y una solución a su problema. 

Mi gato ha perdido la voz y no maulla: causas

Los maullidos de los gatos pueden significar muchas cosas, dependiendo del tipo de maullido que sea y de a lo que atiendan sus dueños cuando lo hacen. Pero, ¿qué significa que no emitan ningún sonido? Algunas de las razones pueden ser las siguientes:

Resfriado

Los gatos también son susceptibles de resfriarse como los seres humanos por una exposición mayor al frío. Las corrientes de aire o su pelaje mojado también pueden hacer que se resfríe y que, finalmente, este resfriado derive en una afonía que no le permita maullar.

Laringitis

Al igual que con el resfriado, los gatos pueden también sufrir de inflamación de laringe como los seres humanos. El frío es el causante de esta laringitis, bien por una bajada de temperaturas o por beber agua muy fría. Los maullidos constantes también pueden ser causa de esta laringitis, que se muestra en forma de afonía y que suele desaparecer en alrededor de 5 días. 

Infección respiratoria

Si ese resfriado no se cura como debe, este puede terminar derivando en una infección respiratoria, cuyos síntomas, además de la afonía y la ronquera, son el decaimiento general y la falta de apetito, junto con la tos carrasposa. Las infecciones más comunes son el calicivirus y la rinotraqueitis felina. Acude a un veterinario con la mayor brevedad posible y no se te ocurra automedicar a tu gato. 

Bronquitis

Otra afección humana que también afecta a los gatos es la bronquitis felina, una inflamación de los bronquios que dificulta la oxigenación de los pulmones y el cuerpo y puede derivar en una inflamación excesiva de la tráquea. De nuevo, el frío y los maullidos constantes son la causa de esta bronquitis que puede llegar a dejar secuelas irreversibles y provocar, incluso, la muerte.

Causas psicológicas

El estrés, el miedo o las conductas aprendidas pueden ser también causa de que tu gato no maulle. La manifestación de su malestar, independientemente de cual sea, es dejar de maullar, pero puede ser también a causa de una educación previa por la que sus maullidos molestaban y, para evitarlos, se le enseñó de maneras poco ortodoxas a no hacerlo.

¿Qué hacer cuando un gato no maulla?

Ya hemos visto las causas más comunes por las que un gato ha dejado de maullar. En cualquiera de ellas, lo mejor es acudir a un veterinario o especialista para saber exactamente cuál es la causa por la que ha dejado de hacerlo y su tratamiento. 

Ten en cuenta también que muchas razas de gato no son muy maulladoras por naturaleza, así que si tienes un gato bengalí, un azul ruso, un abisinio o un gato del bosque noruego no deberías preocuparte por ello. 

Un gato completamente silencioso no es la norma, por ello tienes que estar pendiente de las costumbres de tu gato para saber qué es lo que le puede estar pasando y actuar con la mayor rapidez posible. De nuevo, te desaconsejamos que mediques por tu cuenta a tu gato y que confíes en la experiencia y los criterios de un veterinario.