Cuando adoptas un gato quizá lo último que esperas es que desarrolle problemas de comportamiento. Sin embargo, desafortunadamente, las cosas pueden torcerse por varias razones, lo cual puede llegar a ser muy frustrante tanto para ti como para tu gato. En este post vamos a ver cuáles son los problemas de conducta más frecuentes en gatos y qué hacer para solucionarlos.Lo primero que debes hacer es observar la situación desde la perspectiva de tu gato, esto te ayudará a buscar una manera de atajar el problema.
- Un gato puede estar marcando ante la llegada de un gato nuevo en el hogar.
- Un gato puede estar mostrando agresividad hacia las visitas porque no estaba bien socializado con la gente.
- Un gato puede estar escondido con miedo porque el perro de la familia no se les presentó de manera apropiada y segura.
- Un gato puede estar rascando el sofá porque no tiene un rascador.
- Un gato puede atacar inesperadamente a un gato compañero porque acaba de volver del veterinario y huele diferente...
¿Cómo actuar ante los problemas de comportamiento de un gato?
Cuando se trata de problemas de comportamiento en gatos, las causas específicas son imposibles de documentar y reunir en un solo post porque cada situación se basa en las circunstancias únicas de cada animal, pero sea cual sea el esquema de comportamiento presta atención a los siguientes consejos:Haz una visita a su veterinario
Hay muchas condiciones médicas que podrían ser la causa subyacente de un comportamiento no deseado.Por ejemplo, un gato puede estar mostrando agresividad cuando lo acaricias porque tiene dolor físico. O un gato puede estar haciendo sus necesidades fuera de la caja de arena debido a un problema del tracto urinario. Un gato puede tener miedo de las personas debido a problemas de visión, etc.Un chequeo minucioso por parte del veterinario es siempre el primer paso cuando se quiere tratar un problema de comportamiento.Actúa de manera anticipada
No esperes que un problema de comportamiento se resuelva solo.Si tienes dos gatos que no se llevan bien y tú eres de los que piensan que lo van a "resolver", es posible que los estés preparando para establecer una relación de tensión continua por los siglos de los siglos.Si notas que tu gato ha orinado en la alfombra y asumes que se trata de una acción esporádica y accidental, es posible que te hayas perdido el hecho de que ya haya orinado en varios lugares y no lo hayas detectado antes.¡No esperes cuando se trata de un problema! Cuanto más pronto lo abordes, mayores serán las posibilidades de éxito.Tendrás que ser un poco espía para ayudar a tu gato
No serás capaz de resolver el problema de comportamiento a menos que sepas qué lo está causando.Si tu gato está orinando fuera de la caja de arena, el problema puede tener menos que ver con la caja de arena en sí, en cambio puede tener más que ver con el hecho de que otro gato esté acechando cada vez que camina en dirección al lugar donde se encuentra la caja de arena. En ese caso, ahora tendrías la información que necesitas para comenzar un plan de modificación de la conducta que no solo incluiría añadir más areneros en lugares seguros, sino que también incluiría abordar la relación entre gato y gato.Trabajar en un problema de comportamiento requiere que primero descubras la causa (lo mejor que puedas) para luego crear un plan específico o hacer las modificaciones ambientales apropiadas.Nunca castigues a tu gato
Cualquier tipo de castigo solo servirá para elevar el nivel de estrés de tu gato. Este método de corrección de problemas dañará el vínculo que compartes con tu gato, disminuirá su confianza en ti, aumentará su miedo e incluso podría conducir a un problema más grave como la agresión.Crea una rutina felina
Hazle la vida un poco más fácil para que sepa claramente lo que debe hacer. Sigue pensando como un gato.- Elige un rascador que cubra las necesidades de tu gato.
- Si su gato está haciendo sus necesidades fuera de la caja de arena porque la caja no se mantiene limpia, limpia la caja de arena más a menudo.
Recupera la confianza de tu gato
Si has castigado a tu gato o si ha experimentado estrés y ansiedad debido al problema de comportamiento, es el momento de trabajar en la reconstrucción del vínculo de confianza.Puede que no te apetezca jugar con él, crear juegos divertidos, acariciarlo o hacer cosas para infundirle calma y seguridad, pero eso es exactamente lo que debes hacer. Lo creas o no, cualquier problema de comportamiento que esté experimentando ya le está causando mucho estrés. Tu gato necesita saber que eres un pilar de seguridad y confianza para él. Si no tiene eso de ti, se distanciará aún más.Mantén la calma
Incluso si tu gato acaba de orinar en tu carísimo sofá, no te pongas histérico porque sentirá tu agobio.Si tu gato está tan estresado por algo como para orinar en el sofá y luego te ve actuando de manera furiosa, solo confirmará que su estado de ánimo es el correcto. Esto elevará su nivel de ansiedad y aumentará las posibilidades de que tenga aún más problemas de conducta.El pánico y el enfado por el sofá sucio no harán nada para quitar la mancha. Solo añadirá más daño a una situación ya de por sí tensa.Acuérdate de alabar a tu gato
Hazle saber a tu gato cuando haya hecho algo bien. No importa lo pequeño que sea el paso que dé, si es un paso en la dirección correcta, recompénsalo con elogios o un premio.Pide ayuda para resolver el problema de comportamiento de su gato
Algunos problemas de comportamiento van más allá de la capacidad que tengas para resolver un problema. Si el problema es demasiado grave, peligroso o simplemente no te sientes preparado busca ayuda de un profesional en conducta felina.No te rindas con tu gato
Tu gato es un miembro de la familia y merece tu tiempo y atención para resolver lo que sea que le esté molestando. Trabajar en un problema de comportamiento no es una solución mágica de la noche a la mañana y requerirá un compromiso de tu parte, pero la recompensa vale la pena.Esperamos haberte ayudado a dar los primeros pasos para entender y resolver cualquier problema de conducta que tenga tu gato. Y recuerda que el primer paso es acudir a un veterinario para descartar lo primero cualquier problema físico.