Woody e Ilsa son dos nuevos zarpitos recogidos del centro protección animal de Parla. La mamá humana de estos gorditos ha tenido que hacer frente a una situación de vulnerabilidad económica y habitacional que le ha llevado a recurrir a los servicios sociales para salir adelante. Con todo el dolor de su corazón pero buscando lo mejor para ellos los llevó a la protectora municipal, donde los acogieron por un tiempo improrrogable de dos meses. Decidimos hacernos cargo de ellos aun sabiendo que, por su edad, son "poco adoptables", y es que en Zarpas entendemos que a veces hay situaciones que se escapan de las manos de los dueños de los peludos y hay que echar una mano como se pueda.